Las válvulas de seguridad, empleadas en la industria de la refrigeración y manufactura, son válvulas que liberan la presión y flujo de algún fluido cuando éste sobrepasa la presión a la que fueron calibradas. Este es un método para proteger a las personas, equipos e infraestructura frente a circunstancias de riesgo.

Hace 2 años, HANSEN lanzó la línea de válvulas de seguridad con el sistema POP-EYE, el cual podríamos simplificar con un sistema de alarma visual, precisamente para visibilizar cuando las válvulas de seguridad actúan, aún cuando no se cuente con presencia humana o alarmas de otro tipo.

El sistema denominado POP-EYE, se integra al diseño habitual de las válvulas de seguridad. Forma parte de la válvula en la sección superior y contiene un sistema electrónico que hace que cuando una válvula libera la presión del fluido (refrigerante, amoniaco comúnmente), deja un testigo luminoso en color rojo para que el equipo de operación y mantenimiento sea consciente de que en algún momento el sistema sobrepasó la presión de trabajo nominal.

Este sistema, libre de instalación adicional, mantenimiento o configuración ayuda a los equipos de trabajo a mantener y operar equipos de refrigeración o almacenamiento más seguros.

Tecnología POP-EYE

• Vida útil de 7 años a partir de fecha de fabricación
• Alarma visual que dura 2 semanas después de la liberación de presión
• No requiere instalación, configuración o mantenimiento
• Integrada en todas las válvulas de seguridad HANSEN
• Visibilidad de 360°

Los siguientes videos nos muestran cómo opera esta tecnología y como probar su funcionamiento y condición con un imán simple.

Si es momento de renovar tus válvulas de seguridad, la mejor alternativa es esta tecnología.